viernes, 8 de enero de 2010

GGMárquez, una vida



Gabriel García Márquez. Una vida. Gerald Martin. Debate, 2009. 768 págs.

Terminé de leer hace poco Gabriel García Márquez, una vida, la biografía del inglés Gerald Martin del premio Nobel colombiano. Pocas cosas encontramos en este libro que no sepamos ya. No sabremos qué sucedió exactamente con Vargas Llosa para que un día lo recibiera con un puñetazo después de un tiempo de no verse. Tampoco conoceremos al detalle la siempre difícil relación del escritor con su padre. Ni acabaremos, una vez finalizada la lectura, sintiéndonos poseedores de la verdad absoluta acerca del mago de Aracataca. ¿Y esto por qué? Porque García Márquez ha querido que así sea. A pesar de que en una de sus últimas entrevistas concedidas a un medio de comunicación (al diario La Vanguardia de España, el 2008) dijera que Gerald Martin era su biógrafo oficial, nunca quiso darle a éste todas las cartas descubiertas. "No esperes que haga tu trabajo", le advirtió desde el primer momento, pues siempre ha querido mantener distancia entre su vida privada y su vida literaria. Además, el propio García Márquez, por su vocación de fabulador y su sentido del humor, ha hecho circular distintas versiones de algunos episodios de su vida. Y por esta razón, podemos suponer, el biógrafo ha tardado tanto en publicar el libro. Estaba investigando la vida de García Márquez, no pidiéndole al escritor que se la mostrara libremente.

El resultado es una obra minuciosa, rica y de apasionante lectura. Y es que aquí se encontraron el talento del biógrafo y la extraordinaria vida de un hombre extraordinario.

Uno tiene derecho a resentir un poco ese (quizá) entusiasmo desbocado del biógrafo por el biografiado, pero no puede esperarse menos de un hombre que ha investigado, estudiado y desmenuzado la vida de otro hombre durante más de 17 años, por muy insignificante que este último sea, que no es el caso de García Márquez, por supuesto. Es, si acaso, un pequeño defecto que no le resta el mérito a su grandiosa empresa. Una figura de la literatura mundial como Gabriel García Márquez siempre despierta un interés a veces desmedido. Los detalles de su vida no sólo son noticia para el periodismo cultural sino también para la prensa rosa. Y en determinados momentos, posiblemente cansado de tanta especulación alrededor suyo, el escritor se da a la tarea de brindar al público una imagen de sí mismo que no es necesariamente la verdadera.

Cualquiera puede saber que García Márquez tuvo un inicio de vida difícil, que se prolongó hasta su juventud, cuando a los veintipico de años estuvo viviendo en París, trabajando como corresponsal para algún diario colombiano, y llegó incluso a rebuscar en las bolsas de la basura para poder llevarse algo a la boca. Ahí acumuló deudas, hambre y hasta una desventura amorosa, pero nunca se dio por vencido. Tuvo, además, siempre buenos amigos que lo ayudaron en los peores momentos.

Pero el gran mérito de Gerald Martin en esta biografía no es relatarnos los detalles, acaso desconocidos para la mayoría, de la vida del escritor colombiano sino mostrarnos los diferentes matices en los momentos clave de esa vida. Cómo fueron los días del GM niño o adolescente, cómo los del GM periodista en Europa, los del GM pobre, en la miseria, los del GM hijo y los del GM enamorado, los del GM político, los del GM después de publicar sus primeros cuentos en El Espectador o después de publicar Cien años de soledad, la novela que lo catapultó a la fama. Cómo fue la digestión de cada uno de esos acontecimientos de su vida hasta llegar a la concesión del premio Nobel en 1982. Y las razones, documentadas con absoluto rigor, para que actuara de una manera o de otra, para que al fin y al cabo nosotros, sus lectores, acabemos no identificándonos con él, pero sí al menos comprendiéndolo, y para que salgamos otra vez corriendo, desesperados, a la biblioteca o a las librerías en busca de sus libros.

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