El poeta progreseño Otoniel Natarén durante una lectura de su obra en una universidad sampedrana.
En un intento por justificar el criterio utilizado en la escogencia de los poemas incluidos en la compilación cubano-hondureña “Cuarta dimensión de la tarde”, Otoniel Natarén, responsable de la sección hondureña, dijo que el único objetivo en esta publicación era “hermanar a dos pueblos, Honduras y Cuba”, por lo que no se establecieron parámetros de edad e incluso de calidad.De esta manera, el libro incluye a un autor de 68 años con varios libros a cuestas a la par de autores veinteañeros aún sin libro publicado, deja afuera a poetas como Marco Antonio Madrid y Juan Ramón Saravia, ambos con recorrido y méritos, y permite, sin mayores reparos, la participación de uno que otro principiante.Sin embargo, el trabajo de Natarén resulta de gran importancia para las letras hondureñas, según algunos comentarios de la crítica especializada, pues permite vincular el trabajo poético de dos países separados por un océano y establece un diálogo que podría verse ampliado en futuras publicaciones.El libro fue presentado el 27 de junio en San Pedro Sula y en esta entrevista el ideólogo hondureño del proyecto ofrece algunos detalles sobre el mismo y sobre el panorama de la poesía hondureña con respecto a la de Cuba:
¿Cómo surge la idea de este libro cubano-hondureño?
De la circunstancia del encuentro con mi amigo Rafael Vilches, un escritor de la ciudad cubana de Holguín. Existe en esa ciudad la idea del intercambio de poesía a través de antologías de la colección "Mar por medio", que reúne a escritores de dos ciudades de dos países, no necesariamente las capitales, voluntariamente y con la firme idea de juntar las manifestaciones individuales, divididas apenas por fronteras geográficas.
¿Cuáles serían las principales diferencias entre la poesía cubana y la poesía hondureña, según esta recopilación?
Si acaso hay diferencias en la facultad humana, la encontramos en tantos participantes haya en esta presentación, porque resulta que de cada intervención hay un rasgo característico. Sí puedo decir que existe una identificación de insularidad en los amigos de Holguín, en los que se respira la referencia que sugiere la palabra "Isla"; y de los hondureños se advierte un desahogo de ánimo también diverso. Pero en las dos representaciones hay una posición ante el ejercicio de hacer poesía; creo que de allí se podrán definir otras vitalidades.
¿Cómo es el ambiente literario en la ciudad de Holguín?
Es una actividad que bien merece admiración. Y, todavía más, la participación generosa de las personalidades de su país, pertenecientes o adoptadas por esa ciudad oriental, en esta entrega. Además de otras muestras entre los cubanos, bajo esta colección, existe ya otro intercambio con escritores españoles en "Ciudades bajo un mismo cielo". Eso dice mucho de un pueblo, y de la poesía en este caso.
¿Qué diferencias notás con respecto a Honduras?
Los esfuerzos por publicar tienen mucho parecido entre los países de habla hispana. Pero habría que preguntarse cuánto vale un libro en Honduras y cuánto vale en Cuba, y a qué se debe eso.
¿Qué sigue luego del lanzamiento oficial de este libro? ¿Hay otros proyectos similares?
La ciudad de Holguín, representada por Editorial La Luz, y San Pedro Sula, por Editorial Nagg y Nell, han prestado sus sellos para este intercambio. Eso deja una puerta abierta no sólo para estas dos ciudades sino para toda manifestación y búsqueda de calidad, tanto las que sigue la idea de "Mar por medio" como las individuales.
¿Cómo ves la poesía de la costa norte de Honduras?
Considero que siempre tendrá su expresión a pesar de todo, y va en aumento, que la capital Tegucigalpa tiene su peso y que todas las ciudades tienen sus representantes. El esfuerzo es de todos y la responsabilidad ante la historia es casi siempre individual. Es necesario decir que no todos los poetas caben en una antología debido a las circunstancias, y eso no significa un demérito por ninguno.
4 comentarios:
Si no se establecieron parámetros de ningún tipo: ¿en qué se basaron los ilustres antólogos para realizar su selección?
¿En un antojo de embarazada?
¿Y cómo es posible que alguien con una mediana inteligencia afirme que no importaba la calidad de los trabajos?
Todos ustedes( Mario Gallardo, Geovanny Rodríguez, Gustavo Campos, Darío Cálix, J.J. Bueso, Jorge Martínez.) son unos escritorcitos de quinta. Lean toda su basura antes de publicarla, tal vez logren darse cuenta de lo patéticos que son. Todos ustedes juegan a ser escritores. Busquen algo mejor que hacer. Bola de payasos. Pendejos!!!
Esto es: "La reaparición de los resentidos". Lo curioso es que nunca tienen guevos para dar la cara. ¿Alguno que se atreva?
Anónimo es igual a Nelson o Kaki.
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